LA LLAMADA DE DON ANACLETO

Hace unos minutos acabo de recibir una llamada de Anacleto Angelini. Pensé en no contestar (más por miedo que por flojera), pero atendí. El asunto es que Don Anacleto llamaba para ofrecernos el capital que quisiéramos para hacer lo que nos diera la gana. Al comienzo me pareció una broma, pero cuando el buen hombre comenzó a explicarme el por qué de su ofertón, sus motivaciones íntimas en el atardecer de su vida, debo confesar que me rendí y le dije ok, muchas gracias, juguemos, voy a hablar con la gente que trabaja acá y le contestó su petición a través de este blog. Bueno, debo contarte que no debería haberle dicho eso, ya que estuve como hora y media intentando explicarle qué era un blog, del blog pasamos a internet y de internet llegamos incluso al hardware y a la historia de la informática. Al final no entendió mucho pero supe que contrató a un grupo de gente que arrumó en un edificio que lo asesorará en esos temas modernudos. Malditos chupa sangre. Se aprovechan de don Anacaleto.
Estoy hablando con la gente de la radio. Pronto publicaré la lista de cosas que quieren hacer con el dinero que nos ofreció este señor.

pd: ¿quién lo hubiera pensado? Uno siempre cree que está gente sólo persigue el dinero para juntar más dinero. Y no. Don Anacleto es la excepción que confirma la regla. Y quiero que quede claro: no lo hacemos por amor al dinero. Lo hacemos para hacer feliz a un hombre al final de sus días.