CIENCIA FICCION

Año 2.010, Cámara de Diputados de Chile.

Honorables miembros de la Cámara de diputados:


¿Por qué permitimos a la gente que se drogue por miedo y no permitimos que la gente se drogue por placer? O.k., no sabemos quién tiene predeterminada su carga genética y es probablemente adicta por códigos transmitidos de generación en generación. Pero concedámonos una licencia: ayer se vendía alcohol de forma legal sin preveer quiénes podían ser posibles alcohólicos solamente por mantener un producto que mantenía empleos, industrias, empresas que hacían crecer a un país al punto de disminuir la tasa de desempleo. Pero bien sabemos que el costo no fue menor: miles de accidentes de tránsito, millones de familias se vieron enfrentadas a tristes episodios de violencia intra familiar, estados de demencia terminal e incluso suicidios que guardamos debajo de la alfombra durante más de un siglo. Hoy estamos enfrentados a la coyuntura de impedir la legalización de la marihuana sin antecedentes que agraven su consumo como el caso anteriormente mencionado.
¿Esperamos respeto de parte de los votantes cuando hemos quedado en evidencia hace años? ¿Seguiremos culpando a los jóvenes de apatía e ignorancia, cuando ellos mismos han visto a sus padres consumir en la intimidad de sus hogares y después declarar que jamás en sus vidas han visto un cigarrillo de marihuana? No podemos combatir lo que es peligroso dejando de lado lo que es verdadero.
Por otra parte, hemos permitido que se devoren los bosques, que se aniquilen especies endñemicas nuevamente en pos del progreso. Nuestro país está devastado y probablemente debamos reemplazar los animales de nuestro escudo nacional, porque nuevamente hemos sido incapaces de ser honestos porque la responsabilidad nos obliga a ser primero prácticos, esto en el mejor de los casos, ya que tampoco hemos logrado disminuir los altos índices de pobreza.
Ustedes dirán "el país crece", "el estado y la empresa privada se entienden", "se pagan impuestos más altos para disminuir la deuda", y otras vergonzosas razones que a estas alturas da pudor argumentar, .
Sigamos el conteo: ¿hemos hecho algo por... (continúa)..........