EL BLOG Y LA VERGUENZA

Ok, convengamos que tener un blog da vergüenza cuando descubres que alguien que no conoces te lee. Porque parte como un ejercicio que se justifica con búsquedas, alegatos, descubrimientos e insignificantes aventuras. Debe ser que cuando chico jamás escribí un diario de vida. Bueno, esto no es mi vida. Y tampoco es Radio Concierto, digámoslo. Si no te gusta, no culpes a la radio, la radio es infinitamente mayor a esto. La hacen cuatro personas de planta en editorial y dos al aire. Y cerca de diez conductores. Es decir, hay cerca de 19 personas que no son responsables de este espacio.
Lo cierto es que el mundo blog es un mundo sin editores, es prensa libre buena o mala, pero libre; es como escribir en algún medio sin que te persiga ese discurso de "tantos caracteres" ni el brutal fantasma de la editorial económica que mata a los medios. Y cuando hablo de editorial económica hablo de esa instancia ideologizada llamada "cliente". Asunto muy ordinario por lo demás, en Chile los clientes actúan como cámara de diputados y votan a favor o en contra sin importar el rating. Es cosa de mirar la cantidad de números que vende the clinic y la poca cantidad de avisos. A un tipo de negocios en el extranjero no le importaría de qué tendencia sea el diario, sino el costo por contacto. Y el de The Clinic es infinitamente superior al de algunas revistas que se dedican a escribir sobre la realeza europea como si estuvieramos llenos de nobles.
En fin. Torpezas de este país de clubes raros.
Sea como sea, este blog no es Concierto, es sólo un tubo de escape personal. Es mi Personal, donde a veces hay buenas canciones y otras unos brodrios. Disculpen, necesito sacarme de encima el rol ejecutivo y el blog es un gran espacio para eso. Y sólo es eso.

Amén.