ASI ES LA COSA
Cuesta caminar por el sendero de la emoción. Los tristes -los más comunes- son los espinos que te clavan sus ideas desesperanzadas. Como algunos que viven hablándote de dolor y sufrimiento, con una terrible desconexión con sus voces profundas, aquellas que vienen sin ideas reafirmadas con oraciones sino con pensamientos libres, algunas veces tambien originales. Bueno, nadie indicó la ruta con decisión. Se camina y se aprende a alejarse de los que ya no creen o de los que nunca creyeron en algo. Los colegios no enseñan nada de nada, no hay amistad 2, ni muerte 4; no hay juego ni optimismo uno y dos. Ni compasión. Se aprenden puras huevadas inútiles, desarrolladas para mantener al sistema incluso a costa de uno. Quizás por eso uno aprende a utilizar a los amigos y los transforma en contactos, en vez de amarlos y transformarlos en hermanos. No digan que no pasa. Pasa.
Cuando uno abandona los manuales y sigue el instinto, entonces, recién entonces comienza la realidad. La que uno construye, no la que otros deciden.
¿No se entiende?
Es fácil.
Buenas salenas.
pd: ah. Ronsponja tiene una misión para todos aquellos que todavia se conmueven en este mundo chato.
http://mishermanos73.blogspot.com. Esta linkeado al lado derecho. Charola.
posted by Javier Sanfeliú at 7:30 PM
17 Comments:
Si se entiende, y se agradece.
La universidad probablemente tampoco enseñe mucho...
La realidad es más que nuestros días, la realidad es infinita, inalcanzable, solo podemos entenderla cuando le damos una identidad, la construimos.
Lo demás como bien dices son puras huevadas.
Comparto tu desahogo.
4:11 PM
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4:20 PM
Bueno, también hay de uno en eso de andar aprendiendo en aquellos tiempos en que te enchufan los manuales por el culo. Yo con mi profe jefe de IV medio nos amamos infinitamente: él enseñándome bellos detalles de la vida, yo mirándolo con ojotes de cabra chica. 'Poncho' Venegas, se llamaba. Se cortó su barba milenaria por puro disfrazarse de Óbelix y hacernos reir a todos con su panzota al aire y sus trenzas de lana. Yo lo amé aún más. Otros lo encontraron un viejo absurdo.
Todo depende de nosotros. E' veldá.
Pero ojo, no creo que todos tengamos la misma oportunidad de entender el goce (en su más amplia posibilidad). Supongo que en eso tbn somos diferenciables.
4:22 PM
cierto: el goce es como la moral. Se disfruta con cosas que otros jamás entenderían, dependiendo de la estructura personal de cada uno, su historia y su verdad. Porque el goce, srta. Mel, no siempre está en lo que se hace, sino también, en lo que no.
Salú
4:59 PM
Claro que pasa, y harto. Yo tomé la decisión de alejarme de todo aquel al cual le servía explicitamente de contacto. Fue duro, quedaron repocos, pero fue sano hacerlo.
Te saluda, pablo.
9:47 PM
"El goce no siempre está en lo que se hace, sino también en lo que no"...
No puede haber frase que comparta más. No dejo de asombrarme con lo cierto que resulta eso en mi vida.
Este sábado, en mi cumple, voy a tratar de juntar hartos amigos, y decirles lo que los quiero. Por mientras, Javier, te invito a dejarme un deseo de cumpleaños en mi blog.
Abrazos!
Fco.
7:42 AM
Pues sí Mr. S. Y es lo bello de optar. ;)
8:16 AM
y claro, hay un goce físico que, como el eter, se va -lo sabemos, dura poco- y un goce espiritual, que permanece. Ahí está la eterna pugna entre el deseo y el amor, que deben abrazarse y no separarse. Aunque no sean lo mismo.
Tampoco nos enseñaron eso en el colegio. Deberíamos demandar al Ministerio de Educación, lacayo servil de la matrix y no del ser humano.
8:44 AM
Se etiende y claro. Pero así es la cosa nomás. Que le vamos a hacer
9:41 AM
No, así no es na' la cosa...y te bajai conchetu!!!....
p.d.jeje
10:49 AM
? ramirez al ravotril?
12:46 PM
era el chiste del camionero men...¿no lo recuerdas?
1:18 PM
Chuta, yo no entendí nada, será que vivo en Chillán?... aquí todabía hay hartos olores naturales, yo tomo agua de manzanilla que recojo del campo y hasta me doy el lujo de cosechar papas con mis hijas y después hacemos papas fritas y... yo de verdad no se de que estás hablando. En serio Javier. Un beso.-
1:39 PM
es que si el colegio nos enseñara de amor y amistad, qué haríamos al salir? aprender matemáticas?
el mundo está perfecto, diría el maestro pangloss en cándido.
yo estoy a favor del cole, pero no le daría más de siete años. y a la u, no más de tres.
sl2.
6:36 PM
El papá de Jaime Palillo en Carrusel, decía que los valores se aprendían en la calle. Y le sacaba la cresta al gordito cuando éste daba bote en las clases de la maestra Ximena. Hay que locos son estos cuates no ?
7:07 PM
El año pasado una amiga tarotista me dijo que el año que casi se me va (en el tarot el año va de cumpleaños a cumpleaños), iba a ser de mucha intuición... pensé "La raja, las soluciones las tengo yo".
Pero ha sido lo más difícil de averiguar... saber cuál realmente es la intuición que me grita desde dentro.
Demasiado acostumbrada a razonar seis veces todo.
La intuición, intuyo, se aprende cuando se dejan de aprender cosas (el trillado ámbito cognitivo).
Amé tu post.
abrazos
Shidi !
6:03 AM
primer impacto:pensé en el perseguidor cuando vi esa foto...
Luego leí y pensé en mi hija, en el jardín, en el mundo que se abre infinito de aquí en adelante, donde probablemente encontrará desalmados y compasivos, melancólicos y divertidos, individualistas y solidarios, qué sé yo...la experiencia es la que te agranda el alma, la vida es la que te despierta -o te mata- la fe
Yo crecí con unas botas gigantes aplastándome y robándome la adolescencia y salir del colegio es de las grandes liberaciones de mi vida, nunca volví. Sin embargo, todavía me conmuevo y pienso que deben haber sido las palabras o las letras de las personas vivas y muertas, que se cruzan (o se cruzaron en mi camino) las que lo hacen posible.
sorry, me extendí un poquito
10:38 PM
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